domingo, 19 de diciembre de 2010

Mi historia con twitter


Cada vez me encuentro con más compañeros, amigos, conocidos, etc. que cuando conocen que estoy en Twitter me preguntan "¿y eso para qué sirve?". Sorprendentemente siempre me cuesta mucho explicarlo, así que quizás por organizar mis propias ideas o quizás por comodidad (ahora cada vez que me pregunten puedo dirigirlos a este blog :P ) he decidido que era hora de intentar explicar qué veo en twitter.



Imagen de Matt Hamm (Flickr)

Twitter es un sitio web de microblogging, lo cual nos lleva a pensar que es un blog en pequeñito. Pues así es. Tan pequeñito que no te deja escribir más de 140 caracteres. Ese pequeño y conciso mensaje lo lanzas al vacío, al ciberespacio. Cuando escribí mi primer mensaje en Twitter me sentí como que más que hablar a la red hablaba conmigo misma. Con MyTweet16 he podido ver cuál fueron mis primeros tweets en 2008. Cosas como "Estoy aprendiendo a utilizar Twitter" "¿Es que no se puede borrar lo que se pone?". Lo primero que hay que comprender es que esos mensajes que tu escribes puedan ser vistos por cualquier usuario de Internet (si tienes los tweets (mensajes) abiertos, que es lo normal) pero seguramente llegarán a verlo realmente las personas que te siguen, tus seguidores.

Lo siguiente que hice fue buscar gente a la que seguir, sobretodo a partir de los contactos de contactos (ya sabéis lo que dice la canción "los amigos de mis amigos son mis amigos"). Y encontré a grandes profesionales que siempre he admirado del ámbito de la educación y las TIC. Empecé a ver sus mensajes y me di cuenta de que Twitter me servía para APRENDER. Para conocer enlaces que adjuntaban, para comentar noticias, realidades, experiencias, congresos, etc, etc, etc.

Empiezas a darte cuenta que es un entorno que tiene sus propios lenguajes, para dirigirte a alguien y que esa persona pueda ver que hablas con él/ella se pone el @ delante de su nombre. te das cuenta que puedes ver quién te ha dirigido un tweet en @Menciones.
Sin darte cuenta empiezas a tener seguidores, esto emociona bastante al principio porque te das cuenta que tus tweets no irán al vacío y empiezas a disfrutar la sensación de poder aportar algo a alguien, la sensación de COMPARTIR.

Comienzas a adentrarte en otros servicios como los mensajes directos (para esos tweets que diriges sólo a alguien y que no quieres que nadie más vea), las listas (en las que incluyes a gente por temáticas, perfiles, etc. y que te permiten ver los últimos tweets de esas personas) y finalmente te adentras en el gran mundo de los hashtag (identificado con el símbolo #). Te das cuenta que muchos famosos tienen Twitter y que puedes incluso cotillear lo que hacen, empiezas también ver como muchas empresas utilizan este entorno como medio para darse a conocer.

El mundo de los hashtag fue todo un descubrimiento para mí, gracias a los hashtag asistí en directo a la reunión con la Ministra Sinde con respecto a la Ley de Internet gracias a los tweets de los internautas que comentaban la reunión en directo (#canon) , contemplé abrumada los testimonios en directo del terremoto de Haití (#Haiti), me destornillé de risa ante los comentarios de la miniserie de Felipe y Leticia (#felipeyletizia), me indigné con el resto de cibernatuas ante la huelga encubierta de los controladores (#controladores) y asistí en directo a congresos y encuentros a los que no pude ir pero de los que aprendí enormemente (#gef10, #aviles2010...).

En todos estos eventos que he comentado he observado como los medios de comunicación utilizaban Twitter para publicar noticias siendo consciente de que estaba contemplando ese nuevo periodismo ciudadano del que habla todo el mundo, y es que la información va de abajo arriba, los cuidadanos informan en directo a los medios y estos toman estos testimonios como parte de las noticias.

Parece que los 140 caracteres ya no parecen tan escasos, aunque podamos incluir mensajes personales (quien no le ha echado una foto a esa pedazo de paella que ha hecho el Domingo o ha comentado lo cansado que estaba y que se iba a la cama) yo quiero destacar una de las mayores aportaciones que ha hecho Twitter a mi trabajo como profesora. Soy docente a alumnos de Magisterio. Me gusta actualizar el contenido, acercarlo a la realidad que se van a encontrar en el aula. Un día me interesé por el tema de las competencias, sobretodo a la hora de planificarlas en el currículo, en la Unidad Didáctica. Y puedo decir que gracias a las aportaciones de muchos compañeros (profes a pie de aula, expertos en didáctica, interesados en la materia...) pude mejorar mi material de enseñanza, pude aprender más cosas para al mismo tiempo intentar transmitirla a mis alumnos, los beneficios de esa colaboración, de esa ayuda interesada van más allá de lo que muchas veces pensamos.

Porque todas estas cosas no las posibilita únicamente la plataforma Twitter, la herramienta es el medio que lo facilita, lo que me ha enriquecido son las personas, los profesionales que comentan sus ideas, preocupaciones, inquietudes, experiencias. Los compañeros que contestan las dudas, envían materiales, proponen colaboraciones... todos ellos son los que hacen Twitter, las personas somos las que hacemos Twitter. Y no puedo dejar pasar este mensaje (que ha sido muuucho más largo de 140 caracteres) para agradecerlo. ¡GRACIAS!

Esta es mi historia de momento con Twitter. Una historia que no tiene final, sino que continua.

Nos vemos en el ciberespacio.


miércoles, 15 de diciembre de 2010

¡FELIZ CIBERNAVIDAD!

Está terminando el año, sin darme cuenta ha llegado la Navidad, no podía dejar de pasar la oportunidad de felicitar las fiestas con este gran vídeo sobre la navidad titulado "La historia digital de la Navidad". Cambian las cosas pero se mantiene la ilusión. Que paséis unas felices fiestas y que el año 2011 os traiga mucha felicidad. Nos vemos en el ciberespacio.


sábado, 30 de octubre de 2010

Los mejores grupos de Facebook

Trasteando Facebook he estado viendo toda ese serie de grupos que empiezan con la frase "yo también", quiero compartir con vosotros los grupos que he encontrado más graciosos:

- Yo también aprendo portugués con los botes de champú
- Yo también creo que cada vez que Belen Esteban habla muere un filólogo
- Yo también creo que el niño de la foto del kinder chocolate tiene 87 años
- Yo también siento que todo es posible cuando salgo del cine
- Yo también pienso que en la isla de perdidos hay un Decathlon
- Yo también grito a la tele las respuestas de los concursos
- Yo también me puse varias capas de ropa para no pagar sobrepeso a Ryanair
- Yo también digo "este es repetido" cuando dan los Simpson y aún así lo veo
- Yo también he perdido esperando el palito en el Tetris
- Yo también creo que Google y Hacendado dominarán en mundo
- Yo también vi Titanic y pensé "en esa tabla caben los dos"
- Yo también creo que Jordi Hurtado de "Saber y Ganar" es inmortal
- Yo también calculo cuantas horas voy a dormir antes de acostarme
- Yo también dije algo en voz baja y me contestaron QUEEEE a todo grito
- Yo también arreglé un electrodoméstico pegándole con ira






martes, 26 de octubre de 2010

Libros digitales

En este post quiero realizar una impresión personal de los libros digitales y así retomar el blog que debo reconocer que lo tengo un poco olvidado. Supongo que la excusa es que llevo una época muy complicada de trabajo y de tareas y todas son de esas "para ayer". Espero poder retomar el blog y llevarlo más al día.

Bueno, a lo que vamos. Antes de comenzar con el propio libro digital, debo destacar que yo soy lo que se denomina coloquialmente "una rata de biblioteca", no recuerdo el momento en el que me empezó a gustar leer porque desde que tengo memoria he crecido rodeada de libros. Esto quiero destacarlo porque yo era de las personas que solían decir "a mí no me gusta el libro electrónico, yo prefiero el "tacto" de las páginas del libro", lo decía una y otra vez a pesar de ser una persona pro-tic, pero sentía que el libro perdería su alma.
Hasta que en las navidades pasadas apareció este regalo. Supongo que estaban hartos de la pila de libros que he ido acumulando durante años. Como fue un regalo me propuse probarlo. Al principio me preocupé por si brillaba la pantalla o no y por otro tipo de detalles así pero finalmente lo probé y no he podido deshacerme de él. A nivel personal puedo decir que ha sido uno de los mejores regalos que he tenido por varias razones:
  1. Puedo tener una gran cantidad de libros en un sólo dispositivo.
  2. Existen libros electrónicos que me sería difícil comprar en una tienda y debería perder tiempo en buscar las tiendas que lo vendieran.
  3. Tengo acceso a libros libres que la gente publica por iniciativa y me ha permitido acceder a nuevas obras que éstas si que no podría encontrar a la venta.
  4. La pantalla no emite luz. No entiendo a la gente que defiende a ultranza el Ipad como lector de libros digital. Pienso que para utilizarlo de vez en cuando para leer algo (igual que hacemos en el ordenador) no está mal pero considero que el Ipad no puede ser nuestro lector de libros de cabecera, seguro que permite hacer muchísimas cosas pero un lector de libros electrónico no puede emitir luz, su funcionalidad se basa es que simula a la vista el papel de un libro.
  5. El ahorro de espacio que supone también hay que valorarlo.
  6. He podido incluir mis artículos, mi tesis y otros documentos que he redactado yo misma en el e-book y llevarlos encima en el dispositivo.
  7. Suelen leer diversos formatos. El que yo tengo lee pdf, doc, txt, rdf...
  8. Puedo subrayar y anotar ideas.
  9. Muchos de los libros digitales son más baratos que los libros tradicionales.
El problema: el precio. Es cierto que considero que aún son demasiado caros, supongo que irán reduciéndose de precios conforme salgan al mercado nuevos modelos y más marcas comiencen a fabricarlos.
Hay varias alternativas que están en camino. Mi compañera y amiga Rosa Bernal me acaba de enseñar este libro digital que parece ser que va a tener un precio económico y buena calidad. Yo de momento ando muy contenta con mi e-book y quería compartir mi experiencia como usuaria.

Un saludo. Nos vemos por el ciberespacio-




miércoles, 21 de julio de 2010

El llibre digital de Santillana

Hace unos meses tuve la fortuna de ser una de las personas que recibió documentación sobre la experiencia llibreweb de Santillana (http://www.llibrewebsantillana.cat/).
Llibre web supone una apuesta de la Editorial Santillana por la digitalización de la información.
Cuando comencé a navegar por la experiencia pensé que era otra empresa más que quería innovar trasladando simplemente la información de los libros tradicionales a formato digital. Sin embargo, encontré que este proyecto es una apuesta más amplia por la educación en red. La experiencia tiene un entorno virtual de aprendizaje (por lo que he visto basado en Moodle). La personalización es otro aspecto positivo, ya que parece ser que cada centro educativo puede acceder a crear un espacio propio en red, lo que desde mi punto de vista supone un amplio mundo de posibilidades.
Quizá la única pega que le veo es que de momento únicamente se encuentra en catalán, pero supongo que si la experiencia tiene éxito podrá trasladarse al resto del país. En todo caso, es importante que las editoriales comiencen a valorar las posibilidades de las TIC en la educación, y esta experiencia seguramente será ejemplo para las demás.

viernes, 22 de enero de 2010

Cómo liberar el conocimiento. Licencias

El desarrollo de la sociedad de consumo ha implementado el término de propiedad como un valor fundamental en el entorno en el que vivimos. El hombre tiene una curiosa contradicción, por un lado puede existir el recelo de poseer algo nuestro como propio y por contra, querer copiar y adquirir otra información. Desde el comienzo de la creación intelectual, el hombre ha procurado copiar la información para preservar la cultura. Los copistas medievales dedicaban su vida a ello, y sólo copiaban unos cuantos pergaminos a lo largo de ella. La imprenta mejoró mucho las cosas, pero no todo el mundo tenía la posibilidad de usar la imprenta, y con ella no era económico hacer pocas copias. Para distribuirlas y elegir que se copiaba nació la industria editorial. La imprenta y esta industria, junto con otros factores, ayudaron a que la producción de información escrita creciera como nunca.

La idea del copyright apareció durante el Renacimiento, cuando los pintores se dieron cuenta de que en Europa se podría reproducir sus obras en libros populares. El copyright fue creado como el modo de regular la industria de la pintura. Cuando el concepto emergió no era tan restrictivo, se basaba en que el autor pudiera reconocer las obras publicadas como suyas. Fue más tarde, en el siglo XX, con el capitalismo, cuando se amplió su concepción.

Al comienzo de la inclusión informática, los ordenadores cumplían una función que se puede considerar similar a la del material impreso, en el sentido de medio para exponer una información, y las primeras empresas de software aplicaron una legislación similar a la de las editoriales impresas. Es decir, en teoría, no se puede copiar un programa sin tener el permiso. Este sistema se mantiene basándose en la idea de que nadie sale perjudicado.



Sin embargo, en los últimos años la Web ha sufrido una verdadera revolución social, el intercambio de información y la colaboración hace que las personas compartan todo tipo de información, esto ha creado una controversia frente a la legislación actual. En la actualidad, si queremos que nuestro programa o nuestro contenido pueda ser compartido sin restricciones legales, debemos de indicarlo específicamente. Existen personas a las que no les importa que su trabajo sea copiado sin permiso, es más, les interesa que su obra sea difundida y utilizada por otras personas; para poder utilizar el material de un docente, por ejemplo, necesitaríamos su permiso para poder utilizarlo, pero es muy difícil ponerse en contacto con cada autor de uno de los casos anteriores para pedirle autorización ¿cómo se puede solucionar esto?.

Si queremos que un programa o un contenido sea de libre acceso para todo el mundo existen mecanismos para lograrlo. Para procurar la cesión de derechos de autor a terceros, el autor de un programa debe de utilizar un contrato para dejar constancia de su intención. Las licencias libres han surgido a raíz de la existencia de las licencias prohibitivas, es decir, han surgido como contraposición de la situación legislativa que prohibe la libertad de acceso al conocimiento y a las aplicaciones. En la ilustración se puede conocer los distintos tipos de licencias que podemos encontrar para liberar software y contenido.


Para citar o ampliar información. [Sánchez, M.M. (2008). Cómo fomentar la colaboración en red. El uso de licencias libres. Comunicación en las Actas de las III Jornadas Nacionales TIC y educación. Redes globales en educación Web 2.0. Lorca (Murcia)].